Afilados Madrid tenía muy en mente cual era su objetivo para este partido, reengarcharse en la liga después del traspiés del primer partido. Así fue como el equipo salió ganar y consiguió un fácil 4-1. Durante el encuentro se pudo dislumbrar la existencia de dos equipos que cohabitan en uno mismo, por un lado el de los jugadores clásicos de AM y por el otro, las recientes incorporaciones de extracomunitarios cartageneros. La anécdota del partido se la marcó el arbitro, que ya que se había comprado un silbato nuevo decidió estrenarlo a lo grande pitando cada 30 segundos y de cháchara con los jugadores como si estuviera comprando filetes en el supermercado.
A continuación unas instantaneas del encuentro:
Aquí podemos observar como nuestro portero después de haberse dejado pasar un golazo del contrario, entabla una conversación con el palo para repartir el area a cubrir para cada uno.